La estupidez que suponen las patentes de software

Las patentes de software suponen conceder a una empresa el monopolio sobre un algoritmo de forma que ninguna otra empresa puede usar dicho algoritmo a no ser que obtenga el permiso para usarlo. Van mucho mas allá del copyright, que protege determinado código, para proteger una idea y no una implementación de la idea.

El resultado práctico de las patentes es que las grandes empresas informáticas se hacen con el control de los algoritmos impidiendo así la competencia de las pequeñas y nuevas empresas que pudieran surgir, haciendo que el desarrollo de software sea una actividad peligrosa pues no hay ninguna garantía que al desarrollar un nuevo programa se estén violando patentes que estén registradas, es más, seguramente sea ya imposible escribir ningún programa medianamente grande que no infrinja muchísimas patentes. Por contra las patentes no les suponen inconvenientes a las grandes empresas pues si otra empresa les denuncia por usar una de sus patentes estas contraatacarían con sus propias patentes denunciando asimismo por usarlas a la empresa denunciante, con lo que las grandes empresas están protegidas por el poder que supone tener sus propias patentes, de hecho suelen hacer un licenciamiento cruzado de sus patentes para estar seguros de que no se denunciaran entre ellas.
No obstante han surgido empresas cuya única finalidad es el registro de patentes y no les importa en si nada el desarrollo de software. Este tipo de empresas si que suponen un cierto peligro para las grandes empresas pues no les importa denunciar a cualquier empresa que use sus patentes, de hecho esta es su finalidad, denunciar a cualquiera que use sus patentes para así tener que forzar un acuerdo y llevarse una gran suma de dinero en forma de indemnización compensatoria.

Recientemente se ha producido una sentencia en Estado Unidos contra Microsoft prohibiéndole seguir comercializando Word y teniendo que indemnizar con una gran suma de dinero a la empresa propietaria de una patente relacionada con el uso de XML en los documentos de texto. Sucesos como este demuestran la estupidez que suponen las patentes de software. Seguramente Microsoft conseguirá seguir vendiendo Word sea como sea, cosa que no podría conseguir una pequeña empresa sin un poder económico importante.

Afortunadamente en Europa no se pueden registrar patentes de software es solo cosa de los Estados Unidos y Canadá este despropósito en el desarrollo de software destinado a proteger a sus multinacionales y coartar el surgimiento de nuevas empresas.

Las patentes de software son en especial un freno importante para el desarrollo de software libre al crear inestabilidad jurídica al que lo desarrolla pero sobre todo al que lo usa. Que un algoritmo este patentado implica directamente que no pueda implementarse con software libre de forma legal, de esto hay muchos ejemplos como por ejemplo los formatos de compresión rar y ace, los algortimos de compresión de audio mp3, wma, los códec de video como MOV, WMV o DivX, etc.
Con este viciado entorno legal la única forma defenderse es utilizar el mismo sistema de contraatacar con sus propias patentes así se creo una organización sin ánimo de lucro como iniciativa de grandes empresas como IBM, Sony, Philips, Novell y Red Hat llamada Open Invention Network para defender el software libre de posible demandas relacionadas con patentes.

Actualización: Como era de esperar la prohibición de vender word no iba a durar mucho, Microsoft ya puede seguir vendiendo Office en EEUU